¿Ruido rosa o blanco para intentar dormir?

Oct 27, 2020 | CONSEJOS, DESCANSO

Es probable que, al hablar de sonidos, no sepamos que estos se relacionan con los colores. Sin embargo, lo cierto es que existe un arco iris de sonidos. Al ruido, dependiendo de la frecuencia en la que se registre, se le asigna un color distinto. De este modo, los tonos azules y violetas representan las frecuencias vibratorias más altas y las gamas de colores más rojizos corresponden a las frecuencias más bajas. Este es el motivo por el que podemos hablar de ruido rosa, blanco, rojo, azul violeta, gris…

El ruido blanco y el ruido rosado pueden parecer extraños, sobre todo si no sabemos de dónde provienen y para qué pueden utilizarse. No obstante, estos dos tipos de ruidos coexisten con nosotros diariamente y, por tanto, merece la pena conocerlos. Y es que ¿sabías que el ruido rosa y blanco pueden sernos útiles en la hora de intentar dormir?

El ruido blanco

El ruido blanco tiene un espectro plano que utiliza una escala de frecuencia lineal con energía constante que se refleja en Hercios. Para que lo entendamos mejor, esta señal contiene todas las frecuencias a la vez y todas ellas se encuentran a la misma potencia o volumen.

Además, la ciencia está investigando que este ruido de baja intensidad puede favorecer la relajación y el sueño. Esto se debe a que este sonido actúa como una especie de antirruido que cancela otros sonidos que de normal podríamos detectar. Esto sucede porque, cuando oímos un ruido que se mantiene constante, sin cambios, nuestro cerebro automáticamente bloquea los demás.

Por otro lado, algunos aparatos electrodomésticos como lavadoras o frigoríficos incorporan ruido blanco para enmascarar los ruidos molestos.

El ruido rosa

El ruido rosa es una variante del ruido blanco. Generalmente, el ruido blanco se filtra para reducir el volumen a cada octava y a menudo se hace para compensar el aumento de frecuencia por octava. El espectro del ruido rosa es parecido al espectro medio acumulado de la música sinfónica o de instrumentos armónicos como el piano o el órgano.

Para generar el ruido rosa, se le atenúan al ruido blanco las frecuencias más altas (las moradas y violetas) por lo que predominan más las frecuencias bajas (las rojas). Así pues, el ruido rosa es ruido blanco modificado de forma que es más pobre en frecuencias altas, o lo que es lo mismo, en sonidos agudos.

Generalmente se puede utilizar para calibrar los equipos de audio antes de la actuación de un grupo.

Diferencia entre ruido blanco y ruido rosa

A fin de comprender los matices entre un tipo de ruido y otro, es importante tener en cuenta que el ruido blanco es un ruido que contiene todas las frecuencias y todas ellas se encuentran a la misma potencia o volumen. El resultado es un sonido constante fruto de la suma de todas las frecuencias. De igual modo que el color blanco aparece de la la suma de todos los colores, el ruido blanco proviene de sumar todos los rangos de frecuencia.

En cambio, el ruido rosa puede entenderse como un tipo de ruido blanco que ha pasado por una especie de filtro. Este ruido suena más equilibrado y uniforme que el ruido blanco, por ser más pobre en frecuencias altas (sonidos agudos). Se trata de un sonido más suave y homogéneo parecido a una lluvia ligera o el susurro de las hojas de árboles en un bosque debido al viento.

¿El ruido rosa nos ayuda a dormir?

El ruido rosa puede ser más efectivo que el ruido blanco para intentar dormir. Más que la meditación y al parecer también más que la capacidad de concentración. Y es que el sonido desempeña un papel importante en la sincronización de las ondas cerebrales y la actividad cerebral, incluso mientras dormimos.

Así, un estudio de Northwestern Medicine sincronizó el sonido rosa con el ritmo de las ondas cerebrales en 13 participantes de más de 60 años. De esta forma, a través del ruido rosa se consiguió aumentar considerablemente el sueño profundo y ello mejoró la capacidad para recordar palabras de los participantes. Al parecer, el sueño profundo es fundamental para la consolidación de la memoria. No obstante, con el envejecimiento, el sueño profundo disminuye sustancialmente, por lo que los científicos creen que podría ser uno de los factores principales en la pérdida de memoria.

Los 13 participantes del estudio recibieron una noche de estimulación acústica y una noche de estimulación simulada alternadas. El procedimiento de estimulación simulada fue idéntico al acústico salvo que los participantes no escucharon ningún ruido durante el sueño. Tanto para las sesiones simuladas como para las sesiones de estimulación acústica, las personas realizaron una prueba de memoria por la noche y de nuevo a la mañana siguiente. La capacidad de recordar después de la estimulación a partir de ruido rosa fue tres veces mayor que sin él.

Si quieres probar tú mismo si el ruido rosa puede ayudarte a intentar dormir, puedes reproducir alguno de los muchos videos con este sonido en YouTube. Eso sí, pon las grabaciones a un volumen bajo, que no llegue a ser molesto. Con mucha probabilidad sentirás como poco a poco te vas relajando y el sueño te invade.