Compartir habitación entre hermanos: Ventajas e inconvenientes

Feb 9, 2024 | DESCANSO | 0 Comentarios

Si tienes más de un niño en casa, es probable que te hayas planteado algunas opciones para intentar ahorrar espacio. Y es que, sobre todo si no cuentas con una casa grande, aprovechar cada rincón puede resultar todo un desafío. Por eso quizá te hayas planteado compartir habitación entre hermanos.

En un primer momento, esto puede parecerte genial. Pero, ¿cuáles son los pros y los contras de esta decisión? En este artículo de Maxcolchon analizaremos todos los factores que influyen en un hecho cotidiano, pero importante para la educación emocional de los más pequeños de la casa.

Ventajas de compartir habitación entre hermanos

El hecho de que los hermanos compartan habitación puede tener sus beneficios. Algunos de ellos pueden incluir:

1. Fomentarán el juego entre hermanos

Los niños que comparten habitación con un hermano pueden estar más dispuestos a jugar con sus hermanos, dado que se ven obligados a jugar en presencia del otro. Esto puede hacer que se cree una atmósfera lúdica y alentar a ambos niños a utilizar su imaginación juntos en vez de hacerlo cada uno por su lado.

2. Pondrán en práctica valores como el compartir, solidaridad y tolerancia

Cuando los hermanos comparten habitación, al final, quieran o no, acaban practicando el compartir. Para los niños, compartir no es algo fácil de entender. Los humanos somos criaturas egoístas que necesitamos practicar la empatía para comprender su importancia. Y ¿qué mejor manera de practicar el compartir que con un hermano?

Aquellos hermanos que comparten habitación pueden adaptarse más fácilmente a compartir en otros entornos con otros niños, así como a trabajar su empatía.

3. Creación de un mayor vínculo

Los hermanos que pasan más tiempo juntos pueden tener un vínculo más fuerte entre ellos. Aunque puede llevarles tiempo acostumbrarse, tras un pequeño período, los hermanos pueden aprender a depender unos de otros para convertirse en un equipo a través de sentirse unidos gracias a compartir el dormitorio, y, por ende, el espacio de juego y/o estudio.

4. Apoyo mutuo en los momentos más necesarios

Los niños que duermen en una habitación con un hermano (o varios) pueden dormir mejor durante la noche, ya que tener al otro cerca les hace sentir seguros. En vez de ir a la cama de los papás cuando tengan miedo, puede que se apoyen en su compañero de habitación.

hermanos compartan habitación

Inconvenientes de compartir habitación entre hermanos

Aunque son muchas, no todo son ventajas en lo que a que los hermanos compartan habitación se refiere. También hay algunas desventajas que los padres debemos tener en cuenta antes de lanzarnos a experimentar. Algunas desventajas de que los hermanos compartan habitación pueden ser:

1. Incompatibilidad de horarios

Sobre todo si existe una diferencia de edad entre ambos, es posible que cada uno se despierte a una hora. Si, por ejemplo, tratamos de que un bebé duerma con un niño no tan bebé, es posible que el hermano mayor se vea despierto mucho antes de lo que debería por culpa del pequeño, o al revés.

2. Dificultar la conciliación del sueño

Al igual que ocurre con los horarios para despertarse, es posible que existan grandes diferencias en lo que a las horas de irse a dormir se refiere. Esto puede causar también algún problema, ya que puede que uno de los pequeños necesite irse a la cama mientras el otro duerme y eso pase por despertarle.

3. Problemas con el espacio

Desafortunadamente, los niños no son pequeños para siempre, van creciendo y lo hacen casi sin que nos demos cuenta. Esto implica también a las cosas y la ropa que necesitan. Por eso, a medida que pasa el tiempo, el hecho de que los hermanos compartan habitación puede hacer que no haya espacio suficiente para ambos.

Es por eso que, si tu idea es que los hermanos compartan habitación a largo plazo, lo mejor será que reserves una habitación lo suficientemente amplia. De lo contrario, ¡pasarán los años y ni te darás cuenta de lo pequeña que se ha quedado!

4. Peleas entre hermanos

Sobre todo al principio de empezar a compartir habitación y si el espacio no es lo suficientemente amplio para ambos, pueden darse peleas y discusiones entre los hermanos. Sin embargo, estas tienden a disminuir con el tiempo y una vez ambos se han acostumbrado a compartir el cuarto. Aunque todo depende de la relación que tengan entre ellos.

Cuando separar a los hermanos de habitación

La decisión de separar a los hermanos de habitación puede depender de diversas consideraciones. Por ello, existen una serie de claves, muy basadas en la empatía, el sentido común y la capacidad de anticipación, que se convertirán en señales de que ya ha llegado el momento. Además, debemos poner en práctica una serie de consejos que ayudarán al proceso.

1. Independencia: Como padres, debemos estar atentos a las demandas de independencia de cada hijo y, en la medida de lo posible, satisfacer esas necesidades. Respetar el deseo de autonomía contribuirá al bienestar emocional de los niños.

2. Decisión consensuada: Debemos involucrar a los hijos en la toma de este tipo de decisiones. Para ello, hay que tener en cuenta la edad de cada niño y sus diferentes capacidades, además de aspectos más logísticos y de organización. Si apostamos por este enfoque, nos garantizamos que se sientan parte integral del proceso. Es decir, les ayudará a madurar.

3. Normas de convivencia: Cuando los niños comparten habitación, la capacidad de establecer sus propias normas de convivencia es enriquecedora para su desarrollo. A medida que crecen, puede ser más complicado conciliar unas normas que difieren por la edad de cada niño.

4. Cambio de habitación en fin de semana: Si la decisión es separar a los hermanos, especialmente si son pequeños, lo más recomendable es realizar el cambio durante el fin de semana. Esto proporciona un período de adaptación más tranquilo y permite recuperarse de posibles noches inquietas.

5. Potenciar la responsabilidad del niño: Separar a los dos menores implica que, cada uno de ellos, contará con una habitación individual. Es decir, dispondrán de un espacio propio que impulsará el crecimiento y aprendizaje. Por ello, debemos ser constantes en la transmisión de responsabilidad y orden para desarrollar su autonomía. Gracias a ello, aprenderán a estar solos en ciertos momentos y, por tanto, fomentaremos habilidades sociales.

Cómo reducir el conflicto entre hermanos cuando comparten habitación

Si bien compartir habitación entre hermanos puede tener sus desafíos, existen estrategias efectivas para reducir los conflictos y fomentar una convivencia armoniosa:

1. Edad adecuada para compartir: Evita que tus hijos compartan habitación hasta que el más pequeño tenga al menos un año. Esta medida contribuye a un ambiente más tranquilo y adaptado a las necesidades de cada pequeño.

2. Involucra al hermano mayor: Implicar al hermano mayor en el proceso de trasladar al más pequeño puede generar entusiasmo o frustración. Para evitar lo segundo, fomenta la participación del hermano mayor al permitirle tomar decisiones sobre la disposición de las camas y resalta los aspectos positivos de compartir momentos divertidos juntos.

3. Diálogo abierto: Mantén un diálogo abierto con tus hijos sobre la situación. A medida que surjan los típicos conflictos, promueve la resolución y la negociación en lugar de considerar automáticamente la separación.

4. Espacio individual: Más allá de la cama en sí, asegúrate de que cada niño tenga su propio espacio en la habitación. Para ello, proporciónales áreas de estudio individuales y, al menos, una sección en el armario. Esto facilita el desarrollo individual y minimiza posibles tensiones por la falta de espacio.

5. Resolución de conflictos: Inicialmente, lo más recomendable es asistir a los dos niños cuando se produzcan los primeros conflictos. Aquí será importante fomentar la empatía y no perder nunca la capacidad de negociación. Y es que a medida que crezcan, ellos tendrán que aplicar esas habilidades cuando surjan más o nuevos problemas. Fomentar este ambiente contribuirá a un entendimiento mutuo y a la gestión autónoma de desacuerdos.

Deberían mis hijos compartir habitación si son de diferente género

La decisión de que hermanos de diferentes géneros compartan habitación puede requerir una evaluación algo más cuidadosa, especialmente a medida que los niños crecen y alcanzan la pubertad. Y es que, mientras que en la infancia temprana el género puede no ser un problema significativo, la llegada de la adolescencia sí plantea ciertas consideraciones.

Es posible que, a veces, no podemos proporcionar dos habitaciones separadas, ni siquiera cuando los hijos llegan a la mencionada pubertad. Cuando esto se produce, nuestro deber como padres es el de explorar soluciones. Por ejemplo, el uso de cortinas o incluso la instalación de paredes falsas para establecer ciertos límites seguros y crear espacios privados para los hermanos de diferentes géneros.

En cualquiera de los casos, y teniendo en cuenta que los hijos ya han llegado a la adolescencia, es necesario involucrarlos en una conversación sobre las necesidades individuales y encontrar un equilibrio que respete la privacidad y la comodidad de cada uno de ellos.

En casos donde existe una gran diferencia de edad, se deben tener en cuenta las necesidades específicas del hermano mayor, como un espacio para realizar tareas escolares sin sufrir interrupciones.

En definitiva, cada etapa de la infancia y adolescencia necesita de una evaluación por parte de los padres. El objetivo es la creación de un ambiente armonioso y adaptado a las etapas de desarrollo de nuestros hijos.