Cómo saber si ronco

Si duermes con tu pareja, seguramente ya sepas si roncas. Estarás acostumbrado a ser despertado varias veces durante la noche. Sin embargo, si duermes a solas, es posible que no puedas determinar si roncas o no. Por eso puede que te preguntes, ¿cómo saber si ronco?

Aunque no tiene porqué, los ronquidos pueden ser señal de una enfermedad, y es por eso que, duermas solo o acompañado, conviene saber si roncas para poder ponerle remedio.

Los ronquidos

Ya sabrás bien que los ronquidos se definen como ese sonido áspero que se produce cuando el aire fluye a través de los tejidos relajados de la garganta, lo que hace que estos tejidos vibren al respirar, tal y como explica la Clínica Mayo.

Casi todo el mundo ronca de vez en cuando, pero para algunas personas este problema puede ser crónico, o incluso indicar una condición de salud grave. Algunos cambios en el estilo de vida, como perder peso, dormir de lado o evitar el alcohol (sobre todo cerca de la hora de acostarse), pueden ser de gran ayuda para dejar de roncar.

Además, existen dispositivos médicos y quirúrgicos que pueden reducir los ronquidos, aunque estos no son adecuados ni necesarios para todas las personas que roncan.

Síntomas de los ronquidos

Los ronquidos suelen asociarse a un trastorno del sueño llamado apnea obstructiva del sueño (AOS). No todas las personas que roncan padecen este problema, pero si el ronquido se ve acompañado de alguno de los siguientes síntomas, podría ser necesario consultar al médico para una evaluación adicional de AOS:

• Somnolencia diurna excesiva.
• Dolores de cabeza matutinos.
• Pausas de respiración presenciadas durante el sueño.
• Sueño sin descanso.
• Dificultad para concentrarse.
• Alta presión sanguínea.
• Dolor de garganta al despertar.
• Jadeo o asfixia por la noche.

Si duermes en pareja y los ronquidos son tan fuertes como para interrumpir su sueño, entonces también convendría consultar con el médico.

Además, las personas con apnea obstructiva del sueño generalmente experimentan períodos en los que la respiración se vuelve más lenta o se detiene al menos cinco veces durante cada hora de sueño.

¿Cómo saber si ronco?

En el caso de que ronques, existen otras maneras de saber o averiguar si roncas:

1. Si duermes en pareja, pregúntale.

Si duermes acompañado/a, entonces el mejor monitor de ronquidos duerme a tu lado. Puedes preguntarle: ¿ronqué anoche? Aunque sea incómodo (sobre todo si tu relación es reciente) puede ser de gran ayuda.

Imagina que tienes un/a compañero/a de cama que ronca y cada vez que escuchas un ronquido fuerte y prolongado te despiertas y tu sueño se interrumpe. Si la razón por la que no puedes dormir son los ronquidos de tu pareja, mejor di la verdad. Mantener en secreto los ronquidos de alguien no es bueno para ninguno.

2. Usa la tecnología

Si preguntar te incomoda demasiado o bien duermes a solas, una aplicación del móvil para ronquidos puede ser ideal. Son muchas las que existen, tanto para Android como para iPhone.

Hay algunas que pueden incluso pre-diagnosticar los ronquidos con un solo toque. Antes de irte a la cama, puedes pulsar el botón “empezar a grabar” y por la mañana obtendrás un análisis detallado de tu sueño. Descargar una aplicación para roncar en tu móvil puede ser tu gran solución.

3. Presta atención a los síntomas

Otras señales que te pueden avisar de que roncas son:

• Fatiga.
• Cambios de humor.
• Necesidad de usar el baño por la noche.
• Falta de concentración.

4. Hacer notas para dormir

Otra opción para llevar un seguimiento de tu actividad de sueño es tener un diario de sueño. Puedes apuntar ciertos datos para aprender a dormir mejor:

• La hora en la que te dormiste.
• La hora en la que te fuiste a la cama.
• Cuántas veces te despiertas por la noche.
• La hora a la que te despiertas.

5. Consulta con un médico

Si todavía no tienes claro si roncas o no, puedes consultar con tu médico para que te de algunas indicaciones sobre cómo averiguarlo y qué podrías hacer al respecto.

Y tú, ¿ya sabes si roncas o no? Sigue nuestras indicaciones y, si todavía no lo tienes claro, ¡no dudes en consultar con un profesional de la salud!