Cómo lavar almohadas

Jul 6, 2022 | DORMITORIO, PRODUCTOS | 0 Comentarios

Las almohadas. Un invento que, aunque no ha cambiado practicamente desde que vino al mundo, afortunadamente, lleva muchos años mejorando nuestro sueño. Este elemento del descanso cuenta con una serie de infinitas ventajas que comienzan en su propia concepción. Y es que, a través del material con el que se fabrican, su sensibilidad al peso y a la temperatura corporal provocan que disfrutemos de plácidas noches. Y sino, que se lo pregunten a nuestro cuello y cabeza, los grandes beneficiarios de estos modelos.

Por todo ello debemos tener especial cuidado con lo que se refiere a su mantenimiento, ya que puede ser clave para la duración de su vida útil.

Lavar una almohada según su material

Lo primero que tenemos que tener en cuenta, siempre, antes de intentar lavar una almohada es consultar las instrucciones del fabricante. Y esque son estas instrucciones las que te van a hablar de compatibilidades del material, con diferentes productos, temperaturas del agua, lavadora, etc. Estas instrucciones las encontraremos normalmente en la etiqueta o en la caja del producto, si aún la guardas.

En Maxcolchon somos fabricantes, lo que nos convierte en especialistas del descanso, y en particular, también del cuidado de nuestros productos. Por eso, sabemos que es imprescindible tener en cuenta el material a la hora de plantearnos lavar una almohada. En este post te damos toda la información que necesitas a la hora de lavar una almohada según su material.

 

Producto del año 2022 almohada

Como lavar una almohada viscoelástica

La espuma viscoelástica es un material que la NASA creó hace décadas. Está compuesta por una base de espuma y es un material usado hoy en día en infinidad de objetos cotidianos, entre los que se encuentra la almohada.

Aunque existen cierto tipo de modelos viscoelásticos que sí pueden ser introducidas en la lavadora para su mantenimiento (algunas almohadas transpirables que en su etiquetan así lo indican), lo cierto es que no es nada recomendable lavarlas así. Tanto su espuma como la densidad que la forman nos empujan a limpiarlas con la ayuda de una serie de trucos:

  • Comprueba siempre su etiqueta. Aunque indique que se puede lavar a máquina, intenta evitarlo y apuesta por la limpieza a mano.
  • Nunca utilices productos agresivos para lavarla o acabarás con todas sus prestaciones. Utiliza un tipo de jabón neutro y poco agresivo. Pon especial atención a su lavado si no quieres que aparezca la temida humedad.
  • Si has derramado líquidos y han dejado manchas, utiliza rápidamente un paño seco para absorber el líquido. Después, frota la mancha con otro paño húmedo y algo de jabón neutro. Cuando la mancha haya desaparecido, sécala con la ayuda de un secador eléctrico a cierta distancia o hazlo al aire libre.
  • Para evitar manchas es aconsejable utilizar fundas de almohada para su cuidado. Cuántas más tengas y más las laves, mejor cuidado tendrá tu almohada porque las irás sustituyendo en un limitado periodo de tiempo.
  • Si el problema es que huele mal, puedes ayudarte de las decenas de ambientadores que hay en el mercado o, como remedio casero, utiliza bicarbonato de sodio. Tan solo tendrás que extender un poco de este tipo de ambientador sobre la almohada, dejarlo actuar durante 20 ó 30 minutos y retirar los restos con una pequeña aspiradora de mano.
  • Recuerda que la vida útil de las almohadas viscoelásticas es de dos años. Pasado este tiempo te recomendamos renovarla para seguir disfrutando de sus prestaciones.

ansiedad al despertar

¿Cómo se lava una almohada de látex?

Es posible que te hayas planteado, en un primer momento, lavar tu nueva almohada de látex de forma superficial, metiendo a la lavadora simplemente la funda de la almohada y nada más allá de la ropa de cama. Sin embargo, en ocasiones es necesario llevar a cabo una limpieza más profunda. En concreto, ¿qué pasos debemos seguir para que la almohada de látex quede correctamente lavada?

Ciertas almohadas pueden ponerse en la lavadora y esto nos permite asegurarnos de que la limpieza sea total. Esta información podemos encontrarla en la ficha técnica del producto, y será especificada por el fabricante. Sin embargo, ¿qué podemos hacer si la almohada no puede meterse en la lavadora?

Lo único que nos queda es lavarla a mano, aunque nos de algo de pereza. De todas formas, a la hora de lavar una almohada de látex, los pasos a seguir son sencillos y rápidos:

  • En primer lugar, te recomendamos poner jabón y agua tibia en un recipiente y añadir detergente suave.
  • Después, con un paño limpio, lo mojas y lo escurres muy bien, para ir poco a poco limpiando la almohada con movimientos circulares en cada zona.
  • Por último, hemos de dejarla secar: este paso resulta bastante clave, dado que si la almohada se queda húmeda su interior podría estropearse y hacer que se produjese mal olor. En este caso, te recomendamos utilizar toallas limpias y, posteriormente, dejar secar la almohada en un lugar seco y plano, donde no le de el sol, a ser posible.

Hay recomendaciones que puedes seguir para lavar más fácilmente tu almohada. Sin embargo, resulta clave que evites cometer algunos errores:

  • Cuando la laves a mano, nunca la expongas al sol a la hora de secarla. Esto podría provocar que su tejido se deteriorase.
  • No la metas en la lavadora a no ser que el fabricante indique que esto es posible. Por supuesto, lo mismo ocurrirá con la secadora.
  • No dejes la almohada sumergida en agua. Tal como ocurre con el sol, mojarla demasiado podría deteriorarla.
  • Bajo ningún concepto la retuerzas o la escurras para secarla. Puede deformarse y perder parte de sus propiedades.

Como ves, lavar correctamente una almohada de látex no tiene porqué ser complicado. Sin embargo, resulta clave tener en cuenta algunos requisitos como los que te hemos mencionado. En cualquier caso, te recomendamos adquirir una funda de almohada que evite que tengas que lavar la almohada a menudo. ¡Adquiere una y quítate trabajo de encima!

niños haciendo una pelea de almohadas

Cómo lavar una almohada de plumas

La primera pregunta que nos planteamos con nuestra almohada es, ¿puedo lavarla? Si tu almohada es de plumas o plumón, la respuesta es sí. Aparte de ser almohadas muy suaves, uno de los beneficios de sus rellenos naturales es su fácil mantenimiento. Conviene que laves tu almohada de plumas unas dos veces por año, puesto que no solo pueden acumular nuestro sudor, sino también polvo, moho o bacterias.

Lo más importante al lavar tu almohada de plumas es secarla completamente al final. Para empezar, antes de meter a la lavadora tu almohada de plumas, has de tener en cuenta si las plumas son naturales o sintéticas. Esto es debido a que no se recomienda lavar las almohadas de plumas que son naturales, mientras que las sintéticas sí permiten ser lavadas en la lavadora.

En el caso de tratarse de una almohada de plumas sintética a continuación te damos una serie de consejos con los que podrás mantener tu almohada en perfectas condiciones durante años.

10 Consejos para lavar tu almohada de plumas

1. Ten cuidado con las costuras de la almohada. Podrían abrirse durante la lavadora y perder parte del relleno, por lo que has de poner especial atención en este caso.

2. Lava dos almohadas al mismo tiempo para que el tambor de la lavadora se mantenga balanceado.

3. Meter pelotas de tenis envueltas en calcetines, con el objetivo de sacudir las plumas a lo largo del ciclo de la lavadora.

4. Utiliza detergente líquido para prendas delicadas e introduce una menor cantidad de la que usarías habitualmente.

5. Programa la lavadora en un ciclo suave para ropa delicada.

6. Utiliza un ciclo extra de enjuague y centrifugado para eliminar residuos de jabón y reducir al máximo la humedad.

7. Decide tú mismo la temperatura. Con agua caliente te asegurarás la eliminación de ácaros pero arriesgas que puedan encoger las fibras.

8. Exprime el agua de las almohadas presionando sobre ellas sin cambiar su forma habitual. No las estrujes o retuerzas.

9. No las planches, ni metas en la secadora a más de 60 grados. Esto podría dañar el tejido de la almohada. Mete las almohadas en la secadora con una temperatura baja o fría, tardará más en secarse y requerirá dos o tres ciclos, pero evitarás que se dañe. Introduce bolas de secado para mantener las almohadas esponjosas, como alternativa puedes usar pelotas de tenis.

10. No uses la almohada hasta que no esté completamente seca.