Cómo evitar el dolor lumbar al dormir

Abr 15, 2020 | CONSEJOS, DESCANSO, PROBLEMAS FISICOS

Cuando hablamos de la calidad del sueño, padecer de dolor lumbar al dormir es el problema más extendido entre la población. Un malestar físico que determina e influye en el propio descanso, tanto como causa como consecuencia. Es decir, se convierte en una retroalimentación de la que podemos alterar el orden de los factores: el hecho de dormir en mala postura te puede provocar esta dolencia y, por el contrario, tener esta dolencia en primera instancia puede hacer que duermas de manera incómoda.

Aunque existen muchos tipos de dolores lumbares, normalmente se pueden clasificar en cuatro tipos. Una primera criba que te ayudará posteriormente a entender cuál es tu problema y que solución necesitas: tipo de almohada o colchón, ejercicios físicos recomendados o curas paliativas:

  • Nos hacemos mayores: El envejecimiento suele ir asociado a una mayor tendencia a las inflamaciones, incluyendo la espalda.
  • Fibromialgia: Este dolor muscular crónico aún tiene su origen desconocido. Pero lo que sí sabemos lamentablemente, es la sensación de fatiga y malestar que ocasiona.
  • Dolor inflamatorio: Sin necesidad de hacerse mayor, en ocasiones se producen inflamaciones patológicas que provienen de enfermedades autoinmunes.
  • Posturas incorrectas mientras duermes: Una de las más comunes y que no está asociada a problemas médicos previos. Simplemente, tu postura no es la más adecuada para tu espalda y deberás hacer un ejercicio de concienciación para cambiarla.

Es ahí, en este último punto en el que ya se ha despertado ese dolor sordo a causa de las malas posturas y ya no se separa de ti, cuando nos planteamos la gran pregunta: ¿es mejor dormir boca arriba, de lado o boca abajo?

Dormir de lado es la postura más correcta (salvo si eres de los que necesita abrazar a la almohada) y extendida. Dormir boca abajo produce demasiada presión tanto en la zona lumbar como en los músculos del cuello. Dormir boca arriba, con la espalda pegada al colchón, sería la mejor alternativa posible a la primera opción. En este último caso, algunos expertos recomiendan colocar un pequeño cojín debajo de las rodillas para paliar las molestias que se han generado a causa de los malos movimientos que hemos podido realizar durante el día. De esta manera, aliviaremos estos dolores mientras dormimos.

Maneras de mejorar el dolor lumbar mientras dormimos

Una vez aprendidos los tipos de dolores lumbares más comunes y entendida cuál es la postura más correcta al dormir, llega el momento de sintetizar una serie de consejos y atenciones que pueden ayudar a tu espalda y, por tanto, a la calidad de tu descanso.

  • No elijas el mejor colchón, elige el colchón perfecto para ti: Un colchón de calidad, adaptado a tus necesidades, es el punto de partida para mejorar esas dolencias de espalda. Pero para poder alcanzarlo, lo que tienes que conocer es que no existe el colchón ideal universal pero sí el que aporte una solución para tus problemas. Y lo que tienes que tener claro es que no ha de ser ni muy firme ni muy blando. Respecto al tipo de material, en la viscoelástica podrás encontrar una gran variedad de modelos válidos.
  • Mide los esfuerzos físicos: Si eres de los que tiene un trabajo sedentario (probablemente sentado delante de un ordenador), debes realizar de manera periódica pequeños ejercicios físicos. Nada que no signifique un poco de movilidad en tu musculatura. Por el contrario, no te pases con el trabajo físico. Toma pequeños descansos para que tus músculos pueden recuperarse.
  • Presta atención especial a la almohada: Igual que sucede con la elección del colchón, la almohada va a ser el otro gran elemento que influya en la calidad de tu descanso. Incluso si es necesario, puedes apostar por una almohada cervical de viscoelástica modelada, suave y adaptable.
  • Terapia de frío y calor: Los expertos dictaminan que el calor relaja los músculos y dilata los vasos sanguíneos, lo que permite un mayor flujo de sangre con nutrientes y oxígeno. Gracias a esto, se consigue una mejor calidad en nuestra musculatura, alejada del dolor. Para ello, puedes ayudarte de una manta eléctrica o incluso un baño de agua caliente poco antes de irte a dormir. Por el contrario, con el uso de pomadas en la zona lumbar, podrás reducir la inflamación y destensar los músculos de la zona.