Elegir Almohadas: La guía definitiva

Feb 24, 2020 | DORMITORIO, PRODUCTOS

Si establecemos que el colchón es el rey del descanso, la figura de la reina debería recaer en el otro gran elemento indispensable que determina la calidad de nuestras horas de sueño. Porque elegir la almohada correcta resulta tan determinante como la del mencionado colchón.

Sus diferentes materiales, las distintas categorías que ya existen, el tamaño, la firmeza, la capacidad de adaptación… Hay tantos requisitos y características que las definen que ya no podemos tener excusas si cada día nos despertamos con la sensación de no haber descansado correctamente o incluso con dolores de cuello y espalda.

Las almohadas van a facilitar la mejor postura que debemos disponer para dormir y, para ello, en Maxcolchon ofrecemos un catálogo presidido por almohadas de viscoelástica, de látex y microfibra. Y, para ocasiones especiales, modelos para viajes, para paliar problemas físicos (como por ejemplo dolores cervicales), posturales o incluso de cuna. Diferentes materiales, tipos y productos que obedecen a una serie de requisitos que solo nosotros podemos decidir, pero que sin embargo deberían seguir los siguientes parámetros que vamos a establecer.

Por qué es importante tener una buena almohada

En Maxcolchon nos gusta recordar que pasamos aproximadamente un tercio de nuestras vidas durmiendo, por lo que la calidad de ese tiempo debe tener un impacto positivo y profundo en nuestra salud física y mental. Partiendo de esta premisa, debemos escoger una buena almohada para conseguir los siguientes puntos clave:

El apoyo para un sueño reparador: Una buena almohada proporciona el soporte necesario para mantener la correcta alineación de la columna y el cuello. Escoger perfectamente nuestro modelo de almohada nos evitará trastornos físicos como dolores de cuello, espalda y hombros que pueden surgir de una mala postura al dormir. Y es que cuando descansamos en una posición cómoda y natural, es mucho más probable que disfrutes de un sueño reparador.

Previene problemas de salud: Acertar con la almohada no solo te ayudará a dormir mejor, sino que también es la mejor prevención ante los problemas de salud a largo plazo. Las almohadas ergonómicas, como las almohadas cervicales, pueden ser especialmente beneficiosas para aquellos que sufren de dolores crónicos en el cuello o problemas cervicales. Además, al mantener una alineación adecuada, se reduce la probabilidad de ronquidos y apnea del sueño, lo que mejora la calidad de tu descanso y la de tu pareja.

Comodidad personalizada: Las almohadas disponen de una gran variedad de materiales y firmezas. Esto significa que puedes personalizar tu elección de almohada para que se adapte perfectamente a tus preferencias personales. Por ejemplo, si prefieres experimentar una sensación de suavidad y comodidad, las almohadas de látex o microfibra pueden ser ideales para ti. Si estás en otro punto y prefieres un soporte firme y una adaptación a la forma de tu cabeza y cuello, las almohadas de viscoelástica son una excelente opción.

Mayor durabilidad: Las almohadas de nuestro catálogo están confeccionadas para perdurar en el tiempo. Y es que invertir en una almohada de calidad puede resultar en un producto que te acompañará durante años, lo que significa que no tendrás que preocuparte por reemplazarla constantemente.

Higiene y transpiración: Algunas almohadas están diseñadas para mejorar la transpiración, lo que ayuda a mantener una temperatura adecuada durante la noche y evita la acumulación de calor y sudor. Obviamente, esta cualidad es un peaje obligatorio si queremos un sueño ininterrumpido y confortable.

Adaptabilidad a tus necesidades: Las almohadas no son solo para el sueño. Pueden tener usos múltiples, como ser un apoyo durante la lectura, un cojín de lactancia para las madres, o incluso un compañero de viaje. Tener la almohada adecuada puede hacer que tu vida sea más cómoda en múltiples aspectos.

Qué tener en cuenta a la hora de elegir una almohada

Aunque no siempre se den estos casos, vamos a empezar por los más urgentes. Aquellas personas que requieren de necesidades especiales y cuya elección va a determinar la mejora o no de sus condiciones. Por ello, va a resultar vital que todo aquel que padezca problemas físicos, en especial dolores cervicales, escojan una almohada cervical cuya curvatura va a mejorar la calidad del descanso.

Otro segmento de la población que necesita cuidados especiales y a quien se le debe proteger con especial mimo es el de las embarazadas. Durante los nueve meses de gestación su cuerpo va a experimentar diferentes cambios, por lo que un correcto descanso va a mejorar la calidad de la experiencia y, obviamente, su salud. Ahí es donde entra en juego las almohadas posturales, un modelo que puede funcionar también como cojín de lactancia, como almohada de lectura o un elemento para abrazar.

Por tanto, a la hora de elegir una almohada u otra siempre deberemos tener en cuenta nuestras necesidades.

Tipos de almohadas

Las almohadas son una parte fundamental de nuestro sueño y elegir la adecuada puede marcar la diferencia en la calidad de nuestro descanso. Existen varios tipos de almohadas, cada una con características únicas que se adaptan a diferentes preferencias y necesidades.

Almohadas de látex

Las almohadas de látex son una elección inteligente para quienes buscan un descanso suave y una alineación óptima para el cuello y las cervicales. Este material natural, derivado del caucho, es conocido por su durabilidad y su capacidad para conservar su forma original a lo largo del tiempo.

Si buscas un plus de transpiración, las variantes de látex perforado ofrecen una solución, reduciendo la sudoración en las noches más calurosas. Es decir, los modelos fabricados con este material de origen natural son sinónimo de suavidad, alineación cervical y durabilidad. En otras palabras, una elección sobresaliente para mejorar tu comodidad durante el sueño.

Almohadas de viscoelástica

Las almohadas de viscoelástica son conocidas por aportar firmeza durante el descanso, además de ofrecer una gran capacidad de adaptación ante la presión ejercida por el propio cuerpo del durmiente.

La viscoelástica es un material que responde a la temperatura y la presión, lo que la convierte en una elección popular para aquellos que buscan un soporte personalizado por ese mencionado nivel de adaptabilidad. Y en el catálogo de Maxcolchon encontrarás modelos perforados que mejoran la transpiración, garantizando una experiencia más fresca, especialmente en noches cálidas.

Si eres un durmiente que busca firmeza y una gran capacidad de adaptación, desde Maxcolchon te aconsejamos apostar por el modelo fabricado con material viscoelástico.

Almohadas de fibra

Las almohadas de fibra ofrecen una opción económica sin sacrificar la calidad. Su composición de microfibras sintéticas las hace flexibles y resistentes a los cambios ambientales. Esto las convierte en una elección versátil, adecuada para quienes buscan comodidad y apoyo durante la noche.

La flexibilidad de las almohadas de fibra les permite adaptarse a las diferentes posturas de sueño de forma natural, lo que se traduce en noches cómodas y placenteras.

Cuál es el tamaño ideal de una almohada

En primer lugar, la almohada ha de adaptarse al tamaño de la cama en la que duermes. Es decir, un modelo del tamaño adecuado será capaz de complementar de forma perfecta el espacio disponible en tu cama, evitando que quede demasiado grande o pequeña en relación con el colchón. Esta armonía en las dimensiones no solo añade estética a tu cama, sino que también optimiza la comodidad y el soporte que brinda a tu cabeza y cuello.

En el caso de una cama de matrimonio, encontramos un matiz. Y es que, en este punto, la elección se vuelve especialmente personalizada, ya que puedes optar por dos almohadas del mismo tamaño. ¿Qué significa esto?

Elegir dos almohadas individuales en lugar de una que cubra todo el ancho de la cama permitirá a cada durmiente disfrutar de una almohada que se ajuste perfectamente a sus preferencias individuales. Además, cada vez más, las firmas de ropa de cama fabrican las fundas de almohada en tamaño individual en los juegos de cama de 150 a 200 cm de ancho. 

Si optas por esta alternativa, podrás elegir almohadas idénticas o variar el nivel de firmeza o material de relleno para adaptarse a las necesidades de cada persona. Esto no solo añade versatilidad a tu elección de almohadas, sino que también promueve un descanso más placentero en un entorno de sueño compartido.

Almohada dura o blanda

Escoger entre una almohada dura o blanda, es otro de los pasos indispensables a la hora de escoger un modelo. En otras palabras, determinar el nivel de firmeza más adecuado para nosotros.

En el caso de estar buscando una almohada con un nivel de firmeza alto, la viscoelástica con carbón y el látex son opciones ideales para mantener un buen soporte para tus cervicales. Estos materiales brindan una firmeza constante que puede ser particularmente beneficiosa para aquellos que duermen en una posición que requiere un soporte adicional.

Por otro lado, si prefieres una firmeza intermedia que ofrezca comodidad sin ser excesivamente dura, las almohadas de fibra o de microfibra pueden ser una elección acertada. Estas almohadas son versátiles y se adaptan bien a diferentes preferencias de firmeza, lo que las convierte en una opción popular para quienes buscan un punto intermedio.

En el caso de que necesites una almohada con firmeza baja, especialmente adecuada para niños, en el catálogo de Maxcolchon entrarás modelos diseñados específicamente. Y es que estas almohadas más suaves se ajustan a las necesidades de los más pequeños de la casa, brindando la comodidad y el apoyo necesarios para un descanso reparador.

Al final, la firmeza de una almohada no deja de ser una elección personal que debe adecuarse a factores como la postura de sueño y las propias necesidades del durmiente. Por recapitular, mientras que las almohadas de viscoelástica con carbón y de látex son excelentes opciones si buscas una firmeza notoria, las almohadas de fibra y microfibra son ideales si prefieres una firmeza intermedia que ofrezca comodidad sin ser excesivamente dura.

Y como última vertiente, las almohadas diseñadas específicamente para niños brindan una firmeza más suave, perfecta para asegurar un descanso apropiado en estas etapas de la vida.

Cuál es el mejor relleno de almohada

En el catálogo de Maxcolchon, encontrarás cuatro tipos de rellenos para almohada. Y como en el resto de puntos clave, la respuesta a cuál es el mejor, dependerá de tus necesidades, preferencias y fisionomía.

Relleno de viscoelástica: Este material es ideal para aquellos que tienden a dormir de lado. La viscoelástica se adapta perfectamente a la forma de tu cabeza y cuello, asegurando una alineación cómoda con la columna vertebral. Además, su capacidad de adaptación brinda un soporte excepcional, y sus cualidades anti alergénicas añaden un nivel extra de protección.

Relleno de látex: Derivado del árbol del caucho, el látex se destaca por su elasticidad y transpirabilidad. Es una excelente opción para quienes tienden a sentir calor durante la noche. Además, ofrece un tacto suave y una acogida excepcional para las cervicales, lo que lo convierte en una alternativa de calidad a la viscoelástica.

Relleno de fibra: Fabricado con fibra hueca y silicona, el relleno de fibra es versátil y adecuado para una amplia variedad de durmientes. Es especialmente idóneo para aquellos que cambian de posición con frecuencia durante la noche, ya que permite una adaptación sin interrupciones. Su tacto mullido y alto nivel de transpiración lo hacen una elección acertada.

Relleno de copos: Este relleno sintético forma parte de la categoría de fibra y es excepcionalmente versátil. Gracias a la posibilidad de agregar o quitar copos, puedes ajustar la altura de la almohada según tus preferencias. Esto lo convierte en una opción adecuada para una amplia gama de personas y estilos de sueño.

Mejor almohada según la postura al dormir

La elección de la almohada adecuada depende en gran medida de la postura en la que duermes. Ya sea que te guste descansar boca arriba, de lado o incluso boca abajo (aunque esto último no sea lo más recomendable), hay una almohada perfecta para ti.

Mejor almohada si duermes boca arriba

Si prefieres descansar boca arriba, tu elección ideal recae en almohadas de firmeza intermedia. La posición de dormir boca arriba no requiere una almohada especializada, pero es fundamental mantener la curva natural del cuello y alinear la cabeza con la columna. Para lograrlo, opta por almohadas rellenas de materiales como la espuma viscoelástica, el látex o materiales sintéticos como la microfibra. Estos materiales brindan un soporte firme, se adaptan a la forma de la cabeza y el cuello, minimizan los puntos de presión y previenen molestias.

Mejor almohada si duermes de lado

Dormir de lado es una postura común y, para mantener la columna vertebral correctamente alineada, es esencial llenar el espacio entre la cabeza y el colchón de manera efectiva. Para los durmientes de lado, las almohadas con rellenos de microfibra ofrecen una firmeza alta que evita que la cabeza se hunda demasiado en la almohada, manteniendo la columna alineada. También puedes considerar almohadas viscoelásticas, que se adaptan a la forma de la cabeza y el cuello, proporcionando un soporte personalizado y manteniendo la alineación de la columna.

Mejor almohada si duermes boca abajo

Dormir boca abajo es la posición menos recomendada, pero si es tu elección, debes optar por almohadas más delgadas y planas para evitar la inclinación excesiva de la cabeza y las molestias en el cuello. Las almohadas de látex y viscoelástica son opciones ideales debido a su suavidad y capacidad de compresión. La firmeza debe ser baja, y la almohada debe ser delgada, blanda, estrecha y adaptable, garantizando una posición cómoda para la cabeza y el cuello. El látex perforado ofrece una mejor transpiración, mientras que las almohadas viscoelásticas se destacan por su capacidad de adaptación a la presión corporal, proporcionando un soporte personalizado.

Cómo cuidar las almohadas

Para prolongar la vida útil de tu almohada, sin importar el modelo o el tamaño que hayas elegido, es importante que sigas estos consejos que te proporcionamos desde el equipo de expertos de Maxcolchon:

Lavar la funda: La mayoría de las almohadas vienen con una funda que protege el material interior. Te aconsejamos lavarla de manera regular para mantener el interior de tu almohada higiénico.

Utiliza una funda protectora: Recomendamos el uso de fundas para almohadas, como la funda protectora Tencel. Estos protectores son transpirables y evitan que el sudor penetre en el núcleo de la almohada. De hecho, lo más recomendable es contar con varias fundas protectoras para poder lavarlas con frecuencia y siempre tener una de repuesto disponible para su uso.

Cuida la higiene diaria: Airea tus almohadas todos los días. Para ello, abre las ventanas de la habitación y permite que el aire circule durante unos minutos. Si tienes almohadas de fibra, microfibra o incluso plumón, agítalas diariamente para evitar que los materiales se apelmacen. Además, mantén una buena higiene en tus juegos de sábanas y cámbialos al menos una vez a la semana.

Pon precaución a la hora de lavarlas: Si planeas lavar tus almohadas en la lavadora, ten en cuenta que las almohadas de viscoelástica no deben lavarse así, ya que perderían su efecto memoria. Y, aunque algunas almohadas de látex sí permiten el uso de este electrodoméstico, es preferible evitarlo. Por último, recordar que los modelos de microfibra y plumón sí se pueden lavar en la lavadora, pero siempre que se llene el tambor por completo y si se incluyen varias pelotas de tenis para evitar que se apelmacen durante el lavado.

Además, es importante seguir los siguientes consejos:

– Utiliza programas de lavado para ropa delicada y agua fría.

 – Utiliza detergente líquido para prendas delicadas y evita el uso de suavizante.

– Lee siempre la etiqueta para seguir las instrucciones.

Cuándo se debe cambiar la almohada

Reemplazar tu almohada regularmente es esencial para mantener un sueño de calidad y tu salud en óptimas condiciones. Por lo general, se recomienda cambiar tu almohada cada tres años. Sin embargo, hay una serie de signos clave que indican que es hora de un reemplazo.

Uno de los indicadores más evidentes es la presencia de grumos notables en la espuma o el material de relleno de tu almohada. Estos grumos revelan que la almohada ha perdido su soporte y comodidad originales, lo que puede afectar negativamente tu calidad de sueño.

Las manchas permanentes también son motivo de preocupación. Estas manchas, causadas por el sudor corporal y el aceite, pueden acumularse con el tiempo, afectando tanto la higiene como la integridad del material de la almohada. Si notas manchas notables y permanentes, es un claro signo de que tu almohada requiere un reemplazo.

El despertar con dolores y molestias, especialmente en el cuello y los hombros, es otra señal de que tu almohada ha perdido su capacidad de proporcionar un soporte adecuado. Si tu almohada ya no te permite disfrutar de noches de sueño reparador, es el momento de considerar un reemplazo.

La fatiga al despertar es un síntoma adicional de que tu almohada necesita ser reemplazada. En el caso de sentirte cansado debido a los dolores y molestias que interrumpen tu sueño, es fundamental abordar este problema para garantizar un descanso saludable.

Los dolores de cabeza por tensión, que pueden desarrollarse debido a la falta de soporte adecuado para la cabeza y el cuello, también indican que tu almohada ha cumplido su ciclo de vida útil y necesita ser reemplazada.

Si sufres de alergias, también es necesario cambiar tu almohada con más frecuencia debido a la acumulación de ácaros del polvo. Una almohada antigua y poco higiénica puede empeorar tus alergias, por lo que un reemplazo oportuno es esencial.

Además del tiempo, otros factores, como cambios en tu posición para dormir, condiciones de salud o necesidades de altura, pueden influir en cuándo debes cambiar tu almohada. Presta atención a estos signos y necesidades específicas para garantizar un sueño saludable y reparador.

Consejos a la hora de comprar almohadas

Evalúa tus necesidades personales: Antes de comprar una almohada, has de considerar tus propias preferencias personales. Es decir, la postura para dormir o cualquier necesidad específica, como problemas cervicales o alergias.

Material de relleno: Explora todas las diferentes opciones de relleno. Como ya has visto, cada material tiene sus propias ventajas y desventajas, por lo que deberás elegir el que mejor se adapte a tus necesidades.

Firmeza: La firmeza de la almohada es un punto personal, ya que algunos durmientes prefieren modelos blandos y otros optan por un contacto más duro.

Tamaño: Elige el tamaño de la almohada que se ajuste a tu cama y a tus necesidades personales.

Higiene: Es importante también tener en cuenta la facilidad de limpieza y mantenimiento de la propia almohada. Ya has visto que algunos modelos se pueden lavar a máquina, mientras que otros van a requerir cuidados más específicos y especiales.

Transpiración: Si eres propenso a sentir calor durante la noche, busca almohadas con una buena capacidad de transpiración para mantener una temperatura adecuada mientras duermes.

Marca y calidad: Investiga y elige una marca de confianza que ofrezca productos de calidad. Solo firmas como Maxcolchon que también son fabricantes pueden garantizar una calidad que aumente su durabilidad y prestaciones.

La elección de la almohada adecuada es sinónimo de un sueño reparador y, por tanto, de salud física y psicológica. Y es que apostar por un modelo de calidad nos permitirá mantener la alineación de la columna y el cuello. Es decir, prevenir problemas y trastornos físicos.

Dependiendo de tus preferencias y necesidades, deberemos elegir entre varios tipos de almohadas, como las de látex, viscoelásticas y microfibra. Respecto a los puntos clave como la firmeza o el tamaño, deberemos guiarnos por nuestras preferencias como la postura a la hora de dormir o nuestra fisionomía.

No olvides cuidar tu almohada siguiendo pautas de higiene y mantenimiento para prolongar su vida útil. La inversión en una almohada de calidad es esencial para disfrutar de noches de sueño reparador y mejorar tu calidad de vida en general.

Confía en marcas que son fabricantes como en el caso de Maxcolchon y déjate asesorar por nuestros expertos. No dudes en dedicar tiempo a elegir la almohada que mejor se adapte a tus necesidades y preferencias personales para experimentar un descanso revitalizado y saludable.