Beneficios de bañarse en el mar en invierno

Dic 22, 2021 | CONSEJOS, DESCANSO | 0 Comentarios

Hay quien el frío no le afecta ni lo más mínimo y puede con cualquier temperatura extrema. Otros serían capaces incluso de bañarse en el mar en invierno. Y tú, ¿de qué grupo eres?

Parece que el segundo grupo de personas podría obtener beneficios de su gran resistencia al frío. Y es que, al parecer, bañarse en el mar en invierno podría tener incluso beneficios para la salud.

 Bañarse en el mar en invierno

La natación en agua fría (ya sea en invierno o en hielo) tiene una larga tradición sobre todo en los países del norte. En concreto, esta natación en agua fría se lleva a cabo con normalidad en países como Finlandia, Polonia, Rusia, Noruega o Letonia, entre otros. En concreto, en Europa del Este y en Rusia, la natación de invierno es parte de la celebración de la Epifanía.

Recientemente, esta práctica ha ido ganando popularidad como una competición. De hecho, según un estudio publicado en 2020, desde 2009 se han celebrado competiciones oficiales de natación sobre hielo. Actualmente, podemos encontrar competiciones oficiales de natación de hielo o de invierno en varias distancias, a nivel nacional e internacional. Lo más curioso sobre esto es que los nadadores no nadan con neoprenos u otras protecciones térmicas, sino solo con trajes de baño estándar.

Efectos y beneficios de bañarse en el mar en invierno

Nadar en agua fría es una condición fisiológica muy estresante en la que todo el cuerpo está expuesto al agua helada. Sin embargo, claro está, no es lo mismo si te dedicas a ello de forma habitual. Los nadadores que acostumbran a nadar en agua helada, a través de la exposición crónica al ambiente de agua fría, pueden alcanzar diferentes grados de adaptación al frío. En cualquier caso, ¿tiene este tipo de deporte beneficios para la salud? ¿O puede tener efectos nocivos?

Beneficios de bañarse en agua fría

Parece que, según nos indican los investigadores, bañarse en agua fría regularmente podría tener un efecto positivo en varios sistemas: el sistema cardiovascular, el sistema inmunológico, el sistema endocrino y la psique.

bañarse en el mar en invierno

Más concretamente, ha podido observarse que el bañarse en agua fría de forma regular podría tener efectos en la reducción de la presión arterial y sobre el metabolismo de la insulina, una hormona encargada de regular el nivel de azúcar en sangre.

En lo que respecta al sistema inmunológico, parece que aquellas personas que están acostumbradas a nadar en agua fría de forma regular sufren menos infecciones y más leves. Al parecer, el estrés fisiológico a corto plazo, como la exposición al frío, podría preparar al sistema inmunológico para combatir las infecciones.

Además, también se ha demostrado que nadar en agua helada tiene un efecto positivo en el lado mental de los seres humanos e incluso puede ser antidepresivo, según indican los investigadores.

Posibles efectos nocivos de bañarse en agua fría

Al parecer, según indican las investigaciones al respecto, la natación en agua fría puede aumentar la tolerancia a los factores de estrés y causar endurecimiento. En concreto, parece que, cuando la natación en agua fría es practicada por personas con buena salud general de forma regular, graduada (según la temporada) y ajustada, puede ser beneficiosa para la salud en ciertos sentidos.

Sin embargo, sí es cierto que, si no se está familiarizado con esta práctica o la persona en cuestión no se adapta adecuadamente al agua fría, existe el riesgo de muerte debido a la respuesta inicial de choque de frío neurogénico o a una disminución progresiva en la eficiencia de la natación o hipotermia progresiva.

Además, nadar en agua helada también se ha visto relacionado con los problemas pulmonares. Al parecer, el desarrollo del edema pulmonar es el problema más común. Una revisión sistemática mostró que existe una conexión entre la temperatura del agua y la aparición de un edema pulmonar inducido por la natación.

Es por eso que bañarse en el mar en invierno es algo que se recomienda hacer con mucho cuidado. Lo primero es la salud, por lo que si padeces algún tipo de problema cardiovascular, respiratorio o simplemente crónico, lo mejor será que consultes con tu médico antes de darte ese chapuzón. ¡Por mucho que te guste el agua fría!