Alcachofas: por qué evitarlas a la hora de la cena

Lo más importante para garantizar un buen descanso durante la noche es elegir el colchón adecuado y tener una almohada que se adapte a nuestras necesidades, pero la dieta también puede influir más de lo que parece en un principio en la calidad del sueño. Algunos alimentos, a pesar de ser saludables, pueden estar perjudicando nuestro descanso; por ejemplo, aunque no lo parezca, no es recomendable tomar alcachofas para dormir, y a continuación veremos por qué.

Propiedades de la alcachofa

La alcachofa se caracteriza por ser un alimento rico en fibra, minerales (potasio, calcio, magnesio y fósforo) y vitaminas (A, B, C y E). Se trata de un alimento ligero y saciante debido a la cantidad de agua que contiene y al alto porcentaje de fibra. Sin embargo, cuenta con muy pocas calorías, y con menos de un 1% de materia grasa. Esto lo convierte en el ingrediente ideal para incluirlo en nuestra dieta.

Por otro lado, produce un efecto desintoxicante, ya que favorece la función depurativa del hígado. Estimula la producción de bilis por la vesícula biliar y al mismo tiempo ayuda a restaurar el tejido hepático dañado. Además de sus propiedades altamente depurativas, también ayuda a controlar los niveles de colesterol y a reducir la glucosa en sangre.

Por último, tiene un importante efecto diurético, que evita la retención de líquidos ayudando a eliminarlos del organismo. De esta manera, contribuye a mantener los niveles de presión arterial y disminuye la sensación de hinchazón.

Cómo nos pueden afectar a la hora de dormir

El alto contenido en fibra de las alcachofas produce digestiones más lentas y pesadas, pudiendo provocar dolores estomacales, así como flatulencias y gases, sobre todo en las personas más propensas a ello. Por este motivo, no sería aconsejable consumir alcachofas antes de dormir, ya que es preferible evitar durante la cena cualquier alimento que nos genere malestar en el estómago.

Por otra parte, su efecto diurético, que es tan beneficioso en determinadas ocasiones, puede resultar perjudicial a la hora de dormir; si cenamos alcachofas es posible que nos tengamos que levantar al baño durante la noche. Esto interrumpe el descanso, disminuyendo la calidad del sueño, por lo que sería preferible evitarlo.

Otros alimentos no recomendables

Cualquier verdura que nos resulte indigesta no se deberá consumir en las horas previas a irnos a la cama. Esto dependerá de la sensibilidad del estómago de cada uno, pero en término generales, otras verduras ricas en fibra que también ralentizan la digestión son la lechuga o el apio, por lo que no sería ideal incluirlas en nuestra cena.

Otros alimentos que pueden parecer adecuados en un principio, por sus propiedades nutritivas, pero que también pueden causarnos molestias son las crucíferas. En esta familia de verduras está incluidos la coliflor, brócoli, la col y el repollo, entre otros. Pueden provocar gases e hinchazón, por lo que se deberán consumir a otras horas del día. La cebolla y el ajo, sobre todo en crudo, también pueden producir gases o reflujos.

Con un efecto diurético similar al de las alcachofas, los espárragos pueden causarnos los mismos problemas, por lo que sería recomendable evitar comerlos por la noche, reservándolos para mediodía.

Verduras por las que sustituir las alcachofas

La mayoría de las verduras sería adecuada para incluirlas en nuestra cena, a menos que tengamos una sensibilidad especial a ellas. Por sus propiedades nutritivas, destacan las espinacas como ingrediente ideal para nuestros platos. De fácil digestión y de bajo aporte calórico, contienen hierro, además de minerales y vitaminas. El calabacín sería otro ejemplo de alimento idóneo para incluir en nuestra cena. También tiene gran contenido en minerales y vitaminas, pero pocas calorías, y cuenta con propiedades antioxidantes.

Para asegurarnos de que estos alimentos no nos van a alterar el sueño, es importante recordar que se deben cocinar con muy poco aceite, ya que los platos que contienen muchas grasas provocan digestiones pesadas que no nos ayudan a la hora de dormir.

Como hemos visto, las alcachofas tienen propiedades antiinflamatorias, diuréticas y depurativas, muy beneficiosas para nuestra salud, por lo que es altamente recomendable incluirlas en nuestra dieta. Sin embargo, debido a algunos de los efectos que producen en nuestro cuerpo, es preferible evitar las alcachofas para dormir, y dejarlas para otras horas del día.