7 beneficios del sexo para tu descanso

Feb 21, 2021 | PAREJA

Existe una actividad realizada por el ser humano que es bueno tanto para el bienestar físico como para el psicológico. Brinda efectos positivos sobre la piel y fortalece el cuero cabelludo, el sistema inmunológico, la pelvis e incluso la musculatura. Además, el sudor que se genera durante dicha actividad es buena para limpiar los poros de la piel, algo que repercute en la reducción del acné y la dermatitis. Pero, aún hay más. Esta actividad libera unos estrógenos que aumentan el brillo y la suavidad del pelo humano. Esta actividad no es el deporte. Esta actividad es hacer el amor. Así es. Existen muchos beneficios asociados al sexo.

¿Por qué es tan maravilloso y saludable practicar sexo?

No lo decimos nosotros. Lo dice la Organización Mundial de la Salud (OMS): “la sexualidad humana se define como un aspecto central del ser humano, a lo largo de su vida. Abarca al sexo, las identidades y los roles de género, el erotismo, el placer, la intimidad, la reproducción y la orientación sexo-afectiva”.

Que el sexo es salud es algo que deberíamos tener tatuado en el cerebro. Practicando el sexo con otra persona movemos nuestras articulaciones, mejoramos nuestra flexibilidad y aumentamos el gasto calórico. Esta maravillosa manera de fortalecer la musculatura y los huesos incrementa nuestro sentido del olfato, mejora nuestra salud vascular e incluso reduce en los hombres el riesgo a padecer ataques al corazón.

Y por si esto fuera poco, también ayuda a aquellas personas que tienen problemas para dormir, ya que reduce el insomnio al liberar oxitocina durante el orgasmo.

Aquí van 7 beneficios que aporta el sexo a la calidad de tu descanso

  1. Nos ayuda a dormir mejor y a reducir el riesgo a padecer insomnio: Como ya hemos dicho, el sexo favorece nuestro sueño. ¿Cómo? Al llegar al orgasmo, este actúa como si fuera una inductora del sueño. Y lo hace tras la relajación que alcanzamos tras el clímax, lo cual nos ayuda a liberar oxitocina. Este hecho se hace aún más evidente en los hombres. Tras un buen orgasmo, los varones producen efectos equivalentes a lo que sería tomar más de dos miligramos de Valium.
  1. Además de la mencionada oxitocina, otras dos hormonas que solemos liberar mientras practicamos relaciones sexuales son la serotonina y la norepinefrina. Como bien sabemos, la primera es la encargada de regular y facilitar algunas fases del sueño. La segunda, es justo la encargada de la restante: la fase REM. La suma entre ambas y su interacción es justo la encargada de regular nuestros ciclos del sueño.
  2. Si decíamos que el clímax para los hombres es equivalente a tomarse un Diazepam, en las mujeres resulta un poco contradictorio. Por un lado, es cierto que se liberan ciertas hormonas que aumentan la excitación y, por tanto, la vigilia. Sin embargo, tras el orgasmo, otras hormonas aumentan su presencia (la mencionada oxitocina y la desconocida vasopresina) que ayudan a contrarrestar el cortisol, la encargada de esa excitación. El resultado es positivo tanto para el sueño como para el estado de ánimo.
  3. Más efectos favorecedores para nuestro descanso. El acto y el orgasmo siempre genera unas endorfinas que acaban resultando algo sedantes y analgésicas para nuestro organismo. Por ello, después del clímax, nuestros neurotransmisores entran en un estado de reposo que desemboca en la conciliación del sueño.
  4. Fuera de las endorfinas, las hormonas y demás liberaciones, practicar el sexo es sinónimo de mejorar nuestro estado de ánimo. Una acumulación de efectos positivos sobre nuestro cerebro que acaban repercutiendo en la autoestima, la relación con la otra persona, el estado físico y, por tanto, la nula presencia de estrés y ansiedad. La conclusión está clara: abrazaremos más fuerte a Morfeo.
  5. Según dictaminan datos proporcionados por el Observatorio Nacional de la Incontinencia, 4 de cada 10 mujeres de mediana edad ven como la falta de tono muscular en el suelo pélvico empeora su salud y su estado de ánimo. Más allá de otros ejercicios físicos, practicar el sexo fortalecerá los músculos encargados de detener el flujo de orina. Por cierto, ¿cuántas veces te despiertas cada noche para ir al baño?
  6. El orgasmo tiene efectos parecidos a los de los analgésicos, con el añadido de ser uno natural: Resulta que, tras el clímax, inhibimos la emisión de neurotransmisores encargados del dolor. Un equivalente similar al de tres dosis estándar de morfina.